A parte de estar cada vez más indignada con la política y las leyes de mi país empiezo a estar muy harta de los pseudointelectuales del terruño que no hacen sino acusarnos a todos de indiferentes y que pretenden fomentar una revolución que ni ellos mismos saben cómo hacer. Alguien les ha oído dar algún consejo práctico de cómo enfrentarse al poder establecido? Alguno ha aportado una idea valiosa sobre cómo burlar a la autoridad que nos machaca despiadadamente? Alguno ha tenido una ocurrencia genial para poner en evidencia a los gilipoyas que nos gobiernan ante todo el mundo mundial?
Es muy fácil arengar a las masas a majarse a palos por cortesía de las fuerzas del orden. Y luego qué? Tullidos y arruinados por las futuras multas seremos el ejército de desposeídos más patético y honorable del planeta y ese será nuestro gran logro. Pero eso no va a pasar porque después de haber protagonizado una transición ejemplar y de haber iniciado un movimiento igualmente ejemplar de protesta ciudadana en 2011 los españoles no vamos a dejarnos robar la paz que nos merecemos. Ya se nos ocurrirá algo. Si los intelectuales no nos ayudan con propuestas audaces y los pseudointelectuales nos boicotean con ideas estúpidas a lo mejor un chiste de Forges o de El Roto puede encender la chispa necesaria. En ellos y en mis compatriotas tengo puestas todas las esperanzas.
Y por si sirve de algo, propongo que el 28 de diciembre, coincidiendo además con la fecha en que se suelen publicar las medidas de orden économico y social que acompañan a los presupuestos, salgamos a la calle con pancartas donde se lea: "Rajoy, eres guapo, inteligente y un gobernante cojonudo" y otros piropos por el estilo dedicados a miembros del gobierno, casa real, políticos, banqueros, obispos, sindicalistas y patronos. Sugiero además que se notifiquen las manifestaciones a las respectivas Delegaciones de Gobierno, como es preceptivo, y se las califique de manifestaciones de apoyo incondicional al gobierno y al status quo. Más que nada para ir entrando en el espíritu de la nueva ley de seguridad ciudadana, pero a nuestra manera y en un día propicio. Otro día cualquiera se puede hacer lo mismo pero con una falsa nariz de Pinocho adosada sobre la verdadera y el DNI en la boca para facilitar la identificación.